XI Feria de Platos de Voluntarios sin Fronteras


La Asociación Civil Voluntarios Sin Fronteras (VSF), una organización sin fines de lucro que fomenta el intercambio entre voluntarios y ONGs de diferentes países, realizará la XI Feria Internacional de Platos el 3 de septiembre a las 21.45 hs. en Maure 3955.


Se trata de un evento típico de la institución, por medio del cual, además de recaudar fondos para el mantenimiento de los proyectos sociales, se promueve la alianza y el contacto entre voluntarios, organizaciones y personas interesadas en conocer más a fondo esta manera de actuar.

Al igual que en las ediciones anteriores, los voluntarios de VSF prepararán platos típicos de sus países de origen para que los concurrentes puedan degustar delicias internacionales mientras comparten un agradable espacio de distensión, pero sin dejar de lado el compromiso solidario.


La Feria de Platos es una actividad a beneficio y la entrada cuesta $ 25, aunque se puede adquirir de forma anticipada a $ 22 (solicitándola por teléfono o mail). El pago de la entrada habilita a degustar varios platos internacionales, pizza libre y una bebida.


Voluntarios Sin Fronteras es una asociación civil que comenzó a funcionar en octubre de 2005. Desde entonces, fomenta el intercambio de voluntarios entre países, Organizaciones de la Sociedad Civil y Empresas con proyectos de Responsabilidad Social a través de viajes, eventos y el desarrollo de proyectos sociales locales junto a otras entidades.


Contacto:

Voluntarios Sin Fronteras

4373-0509

Viamonte 1355 2 "E" - Ciudad Autónoma de Buenos Aires

info@voluntariossf.org.ar

www.voluntariossf.org.ar

Presentación del libro "Etnicidad, inmigración y política"


Etnicidad, inmigración y política se ocupa de describir y de analizar cómo las numerosas organizaciones de paraguayos en Argentina (y, con mayor precisión, en Buenos Aires) han luchado, desde su mismo origen y mediante diversas prácticas, contra las formas de subalternización que los estados de origen y destino han proyectado sobre una parte de la población que, como resultado de ello, quedó emplazada y clasificada bajo la categoría de inmigrantes o emigrantes económicos.


Los motivos y algunas certidumbres lo justifican: un motivo es el escasísimo material específico que ha ameritado el tema dentro del universo de las publicaciones académicas; otro, la atención distorsiva que ha merecido de parte de los medios de comunicación, que (en línea con las políticas de Estado a ambos lados de la frontera) han terminado por favorecer la propagación de una cantidad de prejuicios fuertemente discriminatorios.


Las certezas son tres: la primera, que la estigmatización referida exige con urgencia intervenciones que cuestionen los saberes comunes que la soportan y los marcos legales en los que se apoyan; la segunda, que, para que sea eficaz, la denuncia debe dar cuenta metódicamente de la dimensión histórica del proceso; la última (que, a diferencia de las otras, llegó al encuentro del autor durante la investigación) que los sujetos reales que habitan detrás de las categorías aglutinantes propias y ajenas merecen, como cualquier otro, una segunda oportunidad.


El autor, Gerardo Halpern, es investigador Asistente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET). Posee el título de Doctor de la Universidad de Buenos Aires, en el Instituto de Antropología Social de la Facultad de Filosofía y Letras.


Además de ser Licenciado en Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA , es docente en esa carrera y ha dictado cursos de grado y postrado en diferentes universidades.


Actualmente dirige une quipo de trabajo en el marco de los Proyectos de Investigación UBACyT sobre discriminación, desigualdad, medios de comunicación e inmigración. Sobre estos temas ha publicado varios trabajos en la Argentina y en algunos países de América Latina. A la vez, ha participado de diversos congresos nacionales e internacionales.



Informes

Editorial Prometeo
Prensa y Comunicación
4862-6794 interno 32
prensa@prometeoeditorial.com
Pringles 521 - Cap. Fed

Maratón por la Donación Voluntaria de Sangre

“Está difundida la visión de la planificación tradicional y autoritaria, y es nuestra responsabilidad que vaya cambiando poco a poco”

En clara oposición al Modelo de Planificación Tradicional predominante en la década del 60 Mario Robirosa desarrolló una Metodología de Gestión Social Planificada de Proyectos que predica la instauración de una participación concreta y real en la que las personas, a través de sus acciones, ejerzan poder en el proceso de planificación, en contraposición a una participación simbólica a través de la cual no se realiza una verdadera influencia en el proceso, lo que genera la ilusión de practicar un poder inexistente. En este contexto, la participación real es un aprendizaje que el planificador, en tanto orientador y guía, debe propiciar y fomentar.


Mario Robirosa descubrió su vocación de planificador al cursar unas clases de sociología urbana mientras estudiaba arquitectura y, al finalizar esa carrera, se volcó de lleno a la práctica sociológica al ingresar como investigador en el Instituto Gino Germani. Posteriormente estudió en Francia y obtuvo un doctorado en Estados Unidos.


Asimismo, dictó talleres en varios países sobre la Metodología de Gestión Social Planificada y, después de la última dictadura militar, monitoreó trabajos de campo en Argentina. Institucionalmente estuvo en el Instituto Di Tella, en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), en UNESCO y en el Ministerio de Desarrollo Social, entre otras destacadas entidades.


Actualmente se encuentra abocado a la capacitación. Integra el equipo docente del Posgrado en Organizaciones sin Fines de Lucro en la Universidad de San Andrés, y da clases en el programa interdisciplinario de Planificación Regional Urbana de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y en la Universidad Católica.


¿Cuál es el mayor problema que debe afrontar la planificación actualmente?


La planificación todavía tiene mala prensa en el área social porque se la considera una actividad técnica, donde los que saben son los que tienen que hacer las cosas. Este prejuicio es generado por la planificación tradicional, que nunca sirvió para gran cosa ya que sus planes fracasaban y los proyectos no se concretaban en la práctica. Sin embargo, desde entonces se ha modificado el modelo de planificación ya que ahora hablamos de gestionar un proceso, no de hacerlo.


¿En que se diferencian estas concepciones?


Gestionar un proceso implica tener objetivos direccionales cualitativos de qué cambios queremos producir. En vez de verlo como una actividad que produce planes y un proyecto-documento, se centra en hacer cosas en la dirección de lo que se quiere. Por supuesto, cuanto más concretos sean los objetivos y las metas, más fácil resultará la evaluación de los resultados. Por eso es importante tener en claro qué es lo que se quiere conseguir en un plazo determinado. De esta manera, la racionalidad que implica la planificación se centra en la gestión, lo que implica guiar un proceso.


¿Cambia también la posición del planificador?


Claro, porque el hacer lo más racional posible un proceso involucra no sólo a los técnicos sino también a todos los actores intervinientes. Los planificadores no tenemos todas las capacidades de acción ni todos los conocimientos, entonces hay que tratar de ganar las voluntades de los que tienen efectivamente algunos de estos recursos para articularlos en la gestión.


¿En qué consiste esa articulación?


Implica un trabajo de toma de decisiones en un grupo de actores diferentes. En la gestión deben intervenir los distintos actores porque, si no, no se construye el compromiso. Cada actor tiene participar lo más tempranamente posible para poder convencerse de la importancia de su aporte pero también para comprometerse con la contribución de su recurso en tiempo y forma para que el proyecto avance.


¿Qué lugar ocupa el destinatario en la gestión?


En este contexto, el destinatario debe ser considerado como un actor crítico ya que de él depende que el proyecto siga adelante y que sea aprovechado. Hay proyectos que fracasaron por no tener en cuenta los reclamos de este actor esencial. El destinatario es un actor crítico porque puede oponerse al proyecto si no le gusta, y ese es un poder enorme para que el proceso salga bien. De esta manera, en la articulación intervienen saberes diferentes. Cambió la idea de la racionalidad, que era una racionalidad científica, de saberes que se enseñaban en la universidad. Ahora la racionalidad consiste en el intercambio de conocimientos que no sólo son académicos. Cada actor aporta saberes diferentes y son válidos todos.


En el momento de la planificación, ¿cómo se articulan esos saberes?


Necesitamos juntar cabezas para tratar de mejorar nuestra visión, nuestra percepción y nuestra comprensión de lo que estamos haciendo y gestionando. El técnico deba bajarse del pedestal. Hay que abrir canales de comunicación para que los actores dialoguen y, de este modo, encuentren lo que cada uno puede aportar. Una de las fallas que tuvo la planificación en la década del 70 es que se borraba al profesional y se creía que el destinatario siempre tenía razón. Esto no es así porque todos somos influenciables por discursos contrarios a nuestros intereses.


¿Cuál es la actitud de los actores al ser convocados?


Está difundida la visión de la planificación tradicional y autoritaria, y es nuestra responsabilidad que vaya cambiando poco a poco. Uno de los problemas es la mala difusión y comunicación de los programas sociales participativos. Además, la comunicación con los políticos tampoco es buena. Hablan de participación pero, al momento de implementarla, deciden dejarla de lado. Otro problema es que se descansa en el saber del técnico. Sin embargo, los planificadores debemos despegarnos de ese rol ya que, además de opinión académica, tenemos que aportar conocimientos que tienen que ver con la vida y los valores.


¿Cuáles deberían ser los aportes fundamentales de un planificador?


Hay que ser capaz de proponer metodologías y adaptarse a la situación. Hay que saber manejar dinámicas de grupos, comunicar, transferir información, capacitar y ser capacitado por los otros. Hay que traducir y facilitar la comunicación entre los miembros del grupo. Y además, el planificador tiene que lograr el máximo de democratización posible en la toma de decisiones ya que los actores tienen intereses, recursos, capacidades y poderes diferentes. La actividad pasó de ser técnica a ser una actividad político-técnica.


Los planificadores, ¿suelen trabajar con esta visión?


Cada vez hay más conciencia sobre esto, pero depende mucho del sector. El paradigma está cambiando y, aparentemente, va en esta dirección, pero todavía está la inercia de lo que se hace y se piensa de antes. Estamos en un momento de transición, de evaluación de éxitos y de fracasos. Lo importante es que seamos cada vez más críticos para buscar lo mejor.


¿Qué hay que hacer para cambiar este paradigma?


Es un trabajo cultural que debe que encararse en todos los medios y sectores. Tiene que ver con una verdadera democratización. No hay una metodología única a seguir. Sabemos algunas cosas, sabemos qué cosas funcionan y cuáles no, sabemos las preguntas que nos tenemos que hacer en cada situación y conocemos también algunas respuestas. Hay que construir sobre esto porque el cambio cultural es un camino muy largo que tiene que empezarse desde temprano, desde la educación de la escuela primaria.


El papel del Estado en la planificación, ¿cuál debería ser?


El Estado no puede planificar procesos participativos. Puede gestionar a nivel de representantes políticos. Participación no es lo mismo que sistemas articulados de representantes. El Estado tiene que dar grandes lineamientos direccionales pero que permitan su adaptación a nivel local. Los programas estatales han tenido el defecto de ser demasiado detallados, pero así no se resuelven las cosas. No siempre sirve la dirección y la definición vertical para solucionar problemas concretos de realidades específicas. El Estado debería funcionar de forma más descentralizada para llegar a cambios en los marcos de relaciones interpersonales, interfamiliares, comunitarias. Los niveles más altos del Estado tienen que dar apoyo y recursos, además de hacer un seguimiento y monitoreo de lo que está pasando pero, en lugar de ser ejecutores, deberían aceptar la ejecución delineada a nivel local.


¿Qué opina sobre la relación del Estado con el Tercer Sector?


El Estado Nacional no sabe relacionarse con instituciones sociales de base. Sin embargo, no es lo que ocurre a nivel local, ya que en muchos casos las asociaciones civiles se manejan perfectamente con los Municipios. Es la “contra ola” a la democracia formal que vivimos, que está planteando que hay una democracia participativa que debe tener su capacidad de acción. Las asociaciones civiles, por su parte, les tienen alergia a los políticos y, sin embargo, desarrollan tareas políticas y militantes.



Turbulencia y planificación social


Mario Robirosa es uno de los autores de Turbulencia y planificación social, un libro editado en 1990 que se agotó en un año. En él, los autores plantean un cambio total de la noción de planificación. El éxito de esta publicación de Siglo XXI de España y UNICEF motivó su reedición al año siguiente. Fue texto obligatorio en todas las carreras de Trabajo Social del país y partes del texto, actualmente imposible de conseguir, integran desde hace años la bibliografía obligatoria de no pocas cátedras de varias carreras universitarias.


Los autores afirman que, en un mundo que tiende a globalizarse, el Estado no es necesariamente el actor social más fuerte en muchos escenarios ni tiene los recursos disponibles para intervenir por sí solo. Además, el modelo neoliberal es reacio a planificar excepto en lo estrictamente económico. Esto impide el tratamiento planificado integral de situaciones complejas. Hoy, el Estado debe compartir la tarea de planificar con otros actores sociales, y promover y facilitar la participación generando espacios de articulación, negociación y concertación. De esta manera, el paradigma tradicional de planificación según el cual la responsabilidad era exclusiva del Estado, debe cambiarse por un paradigma de la gestión social planificada, multisectorial y participativa, en el que la planificación se desarrolla en escenarios de negociación y concertación. Estos espacios se caracterizan por focalizar en una temática pero sin dejar de considerar las relaciones con lo excluido, en ellos están representados todos los actores significativos (lo que garantiza la legitimidad de la representación y participación) y se tiene en cuenta las relaciones de poder y la conducción democrática.


Asimismo, como en cada escenario social actúan en diferentes direcciones distintos actores con variedad de intereses y grados de poder, y se establecen cambiantes estrategias y alianzas que se redefinen a través del tiempo, el planificador, en lugar de buscar ordenar racionalmente los procesos de la realidad o sus resultados, debe ser capaz de mantener en cada momento alguna direccionalidad deseada en medio de la turbulencia. De esta manera, la metodología de Gestión Social Planificada de Proyectos permite actuar en medio de la turbulencia sin perder la direccionalidad en vista el mediano y largo plazo. Conviven el Estado en tanto agente activo que define los contenidos de las políticas públicas que se operacionalizan en líneas de programas y proyectos, dejando un margen decisorio e interpretativo a los sectores intermedios, y el Técnico, para coordinar agentes e instituciones y facilitar las articulaciones entre los diferentes actores involucrados.


Para propiciar la negociación y concertación hay que establecer canales de comunicación. A través del intercambio de información es posible empezar a construir un consenso y, además, se propicia la participación de los actores intervinientes. De esta forma, las personas que cooperan en la elaboración de las decisiones se muestran más interesadas y envueltas en su ejecución, las decisiones y los programas se enriquecen por la información, el conocimiento y la experiencia de muchas personas, aumenta la probabilidad de correspondencia con las necesidades reales y los participantes amplían sus conocimientos y perfeccionan su competencia.


Con la construcción de este Espacio de Articulación Multiactoral se intenta descentralizar y democratizar las decisiones y se busca que las personas que lo integran participen de una manera activa. En este sentido, son los mismos actores los que aportan sus miradas y opiniones sobre uno o varios temas previamente consensuados.


Esta filosofía implica discutir los problemas y su jerarquización entre todos para confeccionar un Modelo de Procesos Integrados estableciendo los puntos críticos que es necesario atacar. Deciden el “qué hacer” y, sobre esa decisión se basará la futura organización y armado del proyecto que realizará el planificador.


Las metodologías posibles de utilizar en los procesos de planificación no son ideológicamente neutrales. Adoptar el Espacio de Articulación Multiactoral significa, por lo tanto, pensar en los otros en tanto sujetos activos con los cuales es posible negociar y consensuar para tratar de solucionar, juntos, los problemas que entre todos encontraron. Posibilita, además, una constante reflexión, evaluación y aprendizaje grupal, y es un proceso compartido y crecientemente democrático de toma de decisiones.

En voz alta. Relatos para disfrutar con los ojos cerrados

El periodista Héctor Yudchak dio vida al audiolibro En voz alta. Relatos para disfrutar con los ojos cerrados. Esta novedad editorial está compuesta por ocho relatos breves que descubren lo extraordinario en lo cotidiano. Sus protagonistas son los amigos, la infancia, el barrio, el amor, nuestros sentimientos más íntimos. Con humor e ironía, Yudchak sorprende y crea un puente de comunicación entre el relato y el lector.

Son cuentos diferentes pero unidos, en general, por su ámbito barrial, su estilo, su intención de provocar emociones, el impacto de sus finales, una particular utilización del humor.

“Creo que el juego entre la literatura y la música es un campo fecundo para la creación artística –explica el autor para justificar la elección por el formato de audiolibro- . Por otro lado, siempre me gustó transitar la originalidad. Existen grabaciones de clásicos de la literatura universal, pero no obras originalmente producidas en formato de audiolibro, sin el acompañamiento del texto, como es el caso de En Voz Alta”.

La voz de Eduardo Battaglia agrega emoción y belleza a los relatos y la música de Diego Mano los ilustra con gran intensidad. Nora Perlé regala una seductora interpretación del relato final. Se trata, sin duda, de un audiolibro original, para quienes aman la literatura y la música… para disfrutar con los ojos cerrados.

Héctor Yudchak es periodista, productor radial y tallerista de radio y periodismo. Ha realizado prensa política e institucional. Fundó y dirigió FM SUR 102.7, y es coautor, junto a Daniel Míguez de El Diario y la Radio van a la Escuela (aZ, Editora 1998). Produjo y condujo durante seis temporadas Universidad Abierta, el programa de radio de la Universidad Nacional de Lanús. Se desempeñó como secretario de prensa de Fundación Conurbano y fue Director de Modernización del Municipio de Lanús, siendo el creador y primer director del periódico oficial de dicho distrito.

Jornada de Donación Voluntaria de Sangre

El servicio de hemoterapia del Hospital de Niños Dr. Ricardo Gutiérrez y el Club de Donantes Voluntarios de Sangre Dale Vida festejarán el Día del Amigo con una Jornada de Donaciòn Voluntaria de Sangre. Esta acción se realizará el sábado 17 de julio entre las 8 y las 12 de la mañana en el Servicio de Hemoterapia del Hospital (Sánchez de Bustamante y Paraguay).

Informes:
4962-5819
15-4998-8271
dalevida@fibertel.com.ar
http://www.dalevida.org.ar/

10° Encuentro Nacional del Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba

9 y 10 de julio

Facultad de Filosofía y Letras

Universidad de Buenos Aires

Puán 480




Cronograma:

Viernes 9 de julio

9:00 a 10:00 hs. Inscripciones y recepción de los inscriptos.

10:30 hs. Apertura (Aula 104, primer piso).

Himno Argentino. Himno Nacional Cubano.

Palabras de: Adolfo Pérez Esquivel, Dr. Carlos Zamorano (en representación del Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba), representante del ICAP (Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos), Sr. Embajador de Cuba en la Argentina, Aramis Fuente Hernández.

Presentación de Power Point de Propuesta Tatú.

Presentación video sobre el II Encuentro de jóvenes en Cuba por los 5 Patriotas Cubanos (L.A.D.H.)

12:30 a 14:00 hs: Intervalo

14:30 Hs. Panel: “Actualidad de Cuba”, a cargo de Atilio Borón y Stella Calloni.

15:30 a 16:00 hs. Intervalo.

16:00 a 20:00 hs. Trabajo en Comisiones.

20:00 hs. Retiro hacia el Hotel Bauen.

21:30 hs. Cena y Noche Cultural.

Presentación de: “Cuarteto Tango” con pareja de Baile, “Ñanculahuen” con su música latinoamericana y “Renata Rock”

Sábado 10 de julio

8:00 hs. Desayuno en Hotel Bauen para los hospedados.

8:30 hs. Salida hacia la Facultad de Filosofía y Letras

9:00 a 12:30 hs. Trabajo en Comisiones.

12:30 a 14:30 hs. Almuerzo.

14:30 a 17:00 hs. Trabajo en Comisiones.

17:30 hs. En Salón de Actos, Aula 104, Homenaje a Fanny Edelman. Entrega de una plaqueta: “En su X Encuentro Nacional, el Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba reconoce como su decana a Fanny Edelman”.

18:00 hs. Lectura de Documento Final.

19:30 hs. Palabras del Embajador de Cuba en Argentina, Aramis Fuente Hernández.

Cierre musical: Paula Ferré presentación de las Canciones y cierre sorpresa

Educación, medioambiente y desarrollo sostenible


Delfina Molina y Vedia

Prometeo

92 páginas

978-987-574-333-5



La cuestión del desarrollo local ha comenzado a ser enriquecida con diversas miradas, incluyendo aspectos particulares de la realidad cotidiana. Desde una perspectiva predominantemente económica, se ha ido abriendo a enfoques más amplios que permiten sostener análisis y propuestas más comprensivos y con mayor capacidad de adecuación a la realidad de nuestras sociedades.

Educación, medioambiente y desarrollo sostenible
es un nuevo libro publicado por la editorial Prometeo en el que Delfina Molina y Vedia se introduce en esa discusión aportando aspectos que permiten comenzar a pensar en las relaciones que pueden darse entre los procesos de desarrollo local y las dimensiones ambientales y culturales de las sociedades. Para ello introduce, y relaciona, dos aspectos clave: medio ambiente y educación. De manera innovadora vincula procesos concretos dentro de la escuela con la formación de lo que podemos llamar ciudadanía local, que en un sentido amplio tanto los derechos respecto del ambiente como particularmente las responsabilidades sociales frente al mismo. Responsabilidades que son inherentes a los procesos de desarrollo local y que comienzan con la formación inicial de los niños en la escuela.

Delfina Molina y Vedia es Licenciada en Sociología y Profesora de Ciencias Sociales de la UBA, y Magíster en Desarrollo Local de la Escuela de Política y Gobierno de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM). Ha cursado estudios de Posgrado relacionados con temas urbanos y medioambientales (Gestión Sociourbana, FLACSO) y actualmente dicta clases en la Escuela de Política y Gobierno de la UNSAM.

Los nuevos enfermos. Ventajas y desventajas de la medicina preventiva

Esteban Rubinstein

delhospital ediciones

164 páginas

978-987-1639-00-7




La editorial del hospital Italiano de Buenos Aires publicó un nuevo libro en el que el doctor Esteban Rubinstein reflexiona en torno a las ventajas de la medicina preventiva teniendo en cuenta sus aspectos positivos pero también adentrándose en las desventajas que estás prácticas pueden ocasionar.

Según lo desarrollado en esta novedad editorial, la medicina preventiva es eficaz, necesaria y salva vidas. Sin embargo, también puede causar sufrimiento a las personas. Se trata de un tema que suscita amplio debate en Europa y Estados Unidos, por ejemplo, y que en nuestro país todavía no ha alcanzado el nivel de discusión que merece.

A lo largo de Los nuevos enfermos Esteban Rubinstein, un médico de familia que cree en la medicina preventiva y la practica a diario en su consultorio, se cuestiona algunos aspectos de la prevención y explica, en forma amena y didáctica, cómo funciona la medicina preventiva en relación con lo que le ocurre a un individuo en particular y no a la población en general.

La medicina preventiva es un tema que cada día adquiere mayor relevancia mundial. Pese a que las controversias y debates que genera están en notable aumento en otros países, en Argentina es poca la bibliografía y la difusión en torno a este ámbito de la salud. De todos modos, Los nuevos enfermos, no es un libro centrado en los beneficios de la medicina preventiva, al contrario, se trata de una crítica constructiva a estas acciones, mostrando aquellos aspectos que pueden no ser tan positivos.


Los ilusionistas del poder


Guillermo A. Maci

Letra Viva

272 páginas

978-950-649-262-5




Hoy se hace indispensable recuperar el poder político respecto a las tergiversaciones que lo transforman en un argumento en el cual basar las prerrogativas del poder de dominación ejercido por un grupo sobre otro u otros. Y esto presupone la vigencia de la ley y una autoridad de Estado que se base en ella. No basta la sola ley moral ni es válido utilizarla como base exclusiva de la justicia, pues se la puede tergiversar y usar la moral contra la moral misma. La transposición o transpolación del código mediante un uso o aplicación fuera del dominio que le corresponde, son la base de la tergiversación de todos los valores. Esta es la idea que el filósofo y psicólogo Guillermo Maci desarrolla en su nuevo libro Los ilusionistas del poder (Letra Viva, 2009).

Justamente, el abordaje desde ambas disciplinas es lo que le permite analizar de una manera innovadora las crisis políticas que caracterizan a muchos de los sistemas actuales. Según el autor, la responsabilidad moral depende de un compromiso personal, más allá del pacto social de convivencia, y pone a prueba el valor de cada uno de sus integrantes en la relación con los otros. Pero no garantiza el acatamiento al orden legal que se impone a todos por igual (igualdad ante la ley). Nadie es mejor o peor por respetar la ley, sino que se hace responsable ante los otros, instituidos como autoridad, de hecho o no, con las consiguientes penalidades.

La ley moral condena personalmente, la ley jurídica lo hace públicamente. No pone como condición el ser bueno o malo, sino el acatamiento forzoso, más allá del bien y del mal. La ley moral nos enfrenta al juicio de la conciencia moral, la ley jurídica nos enfrenta a la autoridad del estado político. La moralidad no basta para justificar el poder político, porque éste requiere una autoridad suprapersonal, así como a la inversa no basta ser un buen ciudadano para ser un hombre moral. La política que usa a la moral como argumento termina por perseguir y justificar la persecución del ciudadano por razones ajenas a la ley y a la legítima autoridad del Estado, como ha ocurrido tanto en el Estado nazi como en el Estado soviético comunista.

Entre otras cuestiones, en esta novedad editorial Guillermo Maci analiza la utilización de la apariencia como recurso defensivo y desarrolla la forma en que actúa el poder de la imagen: “Cuanto mayor es el empeño en asumir como propia una imagen de prestigio, el que actúa se hace más esclavo de ella, invadido por el personaje que le impone estar en esta escena bajo el rol que creía haber elegido a su arbitrio”. Tal como plantea Maci, “es esta es la paradoja del poder de las máscaras: se apropia del que pretendía usarlas”.

De esta manera, el hombre termina siendo un súbdito del poder que él mismo se impuso al aceptarlo ciegamente. Como “el discurso del hombre a la defensiva es la moderna visión del terrorismo interior de la propia imagen”, el discurso del poder imaginario es la retórica de una coartada, la que efectúa la imagen que inviste el poder.

El poder está en todo lo que existe y puede ser una aspiración constante, no sólo en el sentido de dominar, sino que muchas veces hasta logra ser una exigencia con uno mismo. Al querer vernos como sospechamos que los otros esperan que seamos para ganar así en estima y aceptación, hemos transformado nuestra vida en el ejercicio demoledor de “cómo ser visto”, renunciando a ser “yo” en mi verdad, mis valores, mis condiciones. Este “hombre de mercado” comprable y vendible depende del precio del otro. Esto es lo que ocurre en las sociedades seudodemocráticas, en las que el horizonte de criminalidad, delincuencia, desbordes y violencia configuran su entorno cultural.

La tesis de este libro ha sido trabajada durante tres décadas, en congresos, seminarios, conferencias y comunicaciones en la prensa. Este desarrollo también se vislumbra en los otros libros del autor.


Guillermo Maci ha elaborado sus ideas a partir de reflexiones en el campo de la filosofía y la epistemología. Se dedicó al estudio del griego, la Filosofía Moderna y la Ética. Fue profesor titular en la Universidad de Buenos Aires, Mar del Plata y decano de la Facultad de Filosofía del Litoral; profesor titular de Epistemología Psicoanalítica en la Asociación Psicoanalítica de Buenos Aires y también en diversas instituciones psicoanalíticas. Su campo de investigación ha sido la problemática psicoanalítica ligada a la filosofía, epistemología, lógica, lingüística y antropología. En 1975 fue nombrado Miembro Académico del Departamento de Filosofía de la Academia Nacional de Ciencias. Fue candidato a Diputado Nacional por Unión por Todos y miembro fundador de IDEAR (Centro de Estudios Políticos de Convergencia Suprapartidaria). En 2009 fue designado Profesor Honorario de la Universidad del Salvador, en reconocimiento por sus aportes y trayectoria. Sus libros son: La Otra Escena de lo Real (1979), Repetición Significante (1983), El Objeto y el Otro (1987), El Ojo y la Escena (1999), Yo Mismo y yo (Letra Viva, 2000), Breviario de Drogodependencia (con J.A. Yaría, 2009).

De la dependencia a la autogestión laboral

Gabriela Wyczylier

Editorial Prometeo

978-987-574-321-2

334 páginas




En De la dependencia a la autogestión laboral la socióloga Gabriela Wyczykier analiza el proceso de autogestión laboral que tuvo lugar en la Argentina en la década de los '90 y principios del actual milenio. Dicho proceso surgió como consecuencia de la crisis de desintegración socio-ocupacional y la pérdida de marcos y relaciones colectivas que afectó a importantes segmentos de la población local durante el período analizado. En este sentido, la autogestión laboral se desarrolló como una respuesta de los trabajadores para evitar quedar desplazados y excluidos de aquellos espacios laborales y sociales que habían contribuido a trazar sus trayectorias profesionales y sus perspectivas vitales futuras.
El texto concentra su atención en mostrar en qué sentidos, bajo qué modalidades y formas, es posible abordar el estudio de este proceso a partir del concepto de recolectivización laboral, cuya emergencia se reprodujera en un contexto de significativa descolectivización social y política.
Con esta iniciativa, el texto recorre los antecedentes históricos de la autogestión del trabajo, analiza las variables económicas y políticas que intervinieron en la génesis y el desarrollo del proceso de autogestión actual, y ofrece una caracterización de los principales actores sociales y sindicales que acompañaron y le aportaron fisonomía a este fenómeno. Al profundizar la indagación en un grupo de empresas recuperadas por sus trabajadores y en una cooperativa de trabajo surgida del proceso de privatización de la empresa YPF, el libro se involucra en el estudio de los procesos de conflicto, sociabilidad y politización que caracterizaron a estas experiencias colectivas de trabajo.
El libro se organiza en tres partes. En la primera la autora ahonda en los antecedentes internacionales, nacionales y regionales de los procesos de autogestión laboral. En la segunda, analiza el concepto de descolectivización y el proceso de recolectivización laboral que atraviesa la emergencia de las experiencias autogestionadas. En la tercera, el foco está en las empresas autogestionarias como espacios de conflicto, sociabilidad y politización


Gabriela Wyczykier nació en la Ciudad de Buenos Aires en 1972. Cursó sus estudios de grado en la Universidad de Buenos Aires, donde obtuvo el título de Licenciada en Sociología. En el 2002 se graduó como Magíster en Política, Evaluación y Gerencia Social en FLACSO, sede Argentina, y en el 2007 recibió el título de Doctora en Ciencias Sociales en la misma institución. Actualmente es investigadora-asistente del CONICET, e investigadora y docente de la Universidad de General Sarmiento. Su producción académica y dedicación en el campo de la investigación ha estado focalizada en los estudios sobre la autogestión laboral, el Sector Informal Urano, las organizaciones de la sociedad civil, las instituciones públicas y los programas de empleo, las acciones sindicales de base.